domingo, junio 29, 2008

Era


todo era de un color neutral
la noche
el agua
el beso

todo era de un sonido lento
el jueves
el despertar
las manos

todo
o casi todo
era de un rubor ajeno
las compañías
los viajes
el soplo con que una mujer
dice
soy
viajo
nombro

todo
obedecía
a ritos de olvidados
a conjeturas de ciegos
a gestas casuales con
equivocados y dispuestos

oscurecía en mi nombre
como en una ciudad sitiada por los pájaros

estaba solo
en medio de una tarde
gustando de ver lloviznar
como llorito de un animal de la niebla...

todo era
el sueño de un penitente
el pasado de un verdor
el misterio de unos ojos...

en uno de esos cuadros
se ve partir hacia la nada
mi última pregunta

están tus mejillas allí...
con luna de candela
y señal
otra señal
de que los tiempos son para si
puertos de luz

tu presencia
no detiene el paso de las horas
pero cambia mi mundo

como un beso
la velocidad de la sangre
como una mano
el latido de la otra...

como un dulce miedo de quererte
cambia
el azul de la palabra ayer
por el rojo de la palabra todavía.../


Pablo Dumit

3 comentarios:

Anónimo dijo...

A mi me pareció una poesía muy linda pero a la vez muy intrigante , es decir que no sé a quién va dedicada, si a la vida, a la muerte, o a una mujer.

Paula

Anónimo dijo...

Me parece que el poema habla de un hombre que besó a una mujer. Y que este hombre quedó muy enamorado de esa mujer.

Horacio

Anónimo dijo...

siempre duele lo que era... mientras no sabemos agarrarnos de lo que es y de lo que puede ser...